EVITEMOS EL ENGAÑO
Hablando de nuestros días, el Salvador habló a Sus discípulos como si estuviera haciéndolo a nosotros mismos en persona. La lectura de Sus palabras puede encararse no sólo como una advertencia respecto de la multiplicidad de creencias religiosas que abundarían en estos días. Sus palabras pueden extenderse a los mesianismos modernos de nuestros días, sean credos, ideologías o filosofías de hombres. "Y muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán. Y muchos falsos profetas se levantarán y engañarán a muchos. Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará... ...porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá."¹ Esos falsos profetas a los que refiere la escritura bien pueden referirse a predicadores qué buscan lucro como también a todos quienes, mediante artículos y mucha palabrería, se presentan ante el mundo como "salvadores" portadores ...