LAS INTELIGENCIAS
Nacemos, vivimos y morimos. Entre un momento inicial y el momento final, transcurre el tiempo de nuestra vida. Nuestra vida no es nuestra existencia. Nuestra existencia, de acuerdo con la palabra revelada, no ha tenido ni principio ni tendrá fin. En el discurso del funeral de King Follet, el Profeta José Smith enseñó que nuestra individualidad siempre existió. Desde siempre hemos sido inteligencias eternas. 1 No tenemos mucha revelación acerca de nuestra naturaleza como "inteligencias", pero sabemos que como tales, nacimos en un momento dado como hijos e hijas de padres celestiales, revestidos de un cuerpo espiritual. Del Plan de Salvación sabemos que, habiendo aceptado la voluntad del Padre, nacimos a esta vida terrenal revestidos de un cuerpo mortal, constituido por carne y huesos, dentro del cual mora nuestro espíritu. Gracias al Sacrificio Expiatorio de Jesucristo, nuestra mortalidad terrenal fue vencida, otorgándonos inmortalidad. Más allá del reino y grado d...